La verdad a es que todos estábamos deseando que León obtuviera por fin este título que otras llevaron antes con gran honor. Y sinceramente creo que no faltan razones para tan insigne reconocimiento, pues no creo que no haya un solo leonés, de esos que andan por el mundo, que no eche de menos la gastronomía típica de esta ciudad.

  En los últimos años, hemos asistido a la decadencia de “la tapa” que tanta fama nos dio, si, si decadencia total con la moda de dar de “comer” con cada consumición, aunque sea a fuerza de macro tapas de ínfima calidad que a mayor abundamiento arruinan a las tabernas cercanas que con tanto mimo preparan sus menús.

 Al quien da más, o mejor debería decir quien da menos por un menú, pues tanta es la gente que viene de paso a nuestra ciudad que poco importa a algunos que el cliente se vaya satisfecho o no.

Y en medio de tanta mediocridad, tenemos otros hosteleros que prefieren apostar por el buen hacer, por la calidad, por el trato cercano, por distinguirse con señas propias de identidad. Ya he hablado de algunos de ellos, muchos hay que merecen el reconocimiento de tanto esfuerzo por mantenerse en la brecha al cabo de los años incluso generaciones. Nombres como la Bodega Regia, el Valderas, Casa Rafa, la Poveda y otros que me dejo en el tintero, merecen que me quite el sombrero.

Pues si, lo reconozco, no tengo perdón de Dios por haber dejado abandonado este blog durante tanto tiempo, por haberme dedicado a trabajar y trabajar, y venga de trabajar.

Me duele cada dia que alguien me pregunta por como van mis libros y tengo que confesar que mas abandonados que un atleta sin Rexona, pero ya está bien, tengo que volver y seguir contando todo lo que llevo dentro, porque sino, voy a explotar, tantas ideas, tantos sueños, tantas cosas que han pasado...

No es fin de año, para hacer un nuevo proposito, pero no importa, siempre hay un buen motivo para ello... el caso, es que casi no se ni por donde empezar... donde lo dejamos???

Si algo bueno tienen los viajes largos por carretera, es que el tiempo en ellos se detiene. Y cuando digo que se detiene, me refiero a que uno puede hacer cosas que de otra manera seria muy dificil, pues no recuerdo ningun dia de mi vida en el que pudiera quedarme pegada a la radio durante 10 horas seguidas, saltando de emisora en emisora y dejando que solo los caprichos de las "ondas", decidan por mi que emisora escuchar en cada momento.

Eso me sucedio hace unos días, y por cosas del destino, o de las "ondas" que antes decia, tuve la oportunidad de escuchar la entrevista que realizaron a Dña. Ana Maria Martin Gaite en Radio Nacional.

 Reconozco, que aunque el nombre me resultaba familiar, en principio no conseguia centrarla en ningún lugar o disciplina concreta. En su presentación, se hacia referencia a su edad, 92 años, lo que me despistó tremendamente. Hablaba de la generacion del 50 y de escritores, y claro, de su hermana Carmen: Carmen Martin Gaite, ¿quien sino?. Dijo cosas increibles, como el consejo que le dio a su hermana cuando esta perdió a su hija, despidiendose de ella en el aeropuerto y nada menos que se le ocurrio recomendarle "que se inventara una vida". Puede parecer absurdo, incluso pueril, pero, cuando la vida te pega un zarpazo tan profundo, porque resulta que no es ninguna autopista... ¿qué otra cosa se puede decir?

Me encanta el slogan que hace unos años diseño BMW que decia aquello de ¿Te gusta conducir?, sin embargo yo me quedaria con el mismo que llevan en su sangre las hermanas Martín Gaite y que podria traducirse en un ¿Te gusta vivir?, para contestar un SI rotundo, y que cuando me llegue el momento de dejar esta vida pueda decir, parafraseando a Dña. Ana, que lo hago de mala gana pues aun dejo muchas cosas por hacer.

              Me van a perdonar, pero empiezo a estar un poco harta del tema deberes si deberes no. Me hastía tanto como discutir aun sobre igualdad entre hombres y mujeres u otras cuestiones que creo que en el siglo XXI deberían estar superadas.

                Antes de nada, quiero dejar muy claro que lo que aquí expongo, es una mera opinión personalísima, como determinados derechos y obligaciones y que respeto al máximo las opiniones contrarias, pues si algo me ha enseñado la vida es que no existen verdades absolutas, y solo cada experiencia nos dice si la decisión que tomamos en un sentido u otro fue la acertada. Lo malo es que siempre falta informacion al momento de tomarlas.

                Bien, pues partiendo de la base de que soy una defensora a muerte del esfuerzo personal, la disciplina y la necesidad de enseñar a nuestros hijos que como dijo el otro dia el cura de mi pueblo con excelente criterio, “enseñad a vuestros hijos que no hay nada verdaderamente importante que se pueda conseguir rápido, al momento que se desea y sin esfuerzo”, también creo que hay muchas maneras de que nuestros hijos interioricen esta máxima.

    Como se suele decir en mi tierra, ¡¡¡éramos pocos y parió la abuela!!!

 Después de las Preferentes y subordinadas,  las acciones de Bankia, los swaps, y no se cuántas cosas más, estos días nos desayunamos con la noticia de que aquellos clientes del Banco Popular que creyeron sacar un poco más de rentabilidad a su dinero adquiriendo bonos convertibles de la Entidad, perderán como mínimo el 30% de su inversión, según el Presidente del Grupo, al no haberse leído la letra pequeña del contrato.

 Estos bonos, denominados "Bonos subordinados necesariamente convertibles" comercializados en el año 2009, con plena vigencia de la normativa Mifid, volvió a enmascarar un producto complejo con un gancho de una rentabilidad fija muy atractiva: 7% el primer año y el resto Euribor más 4% y con vencimiento en 2013.

    Todos los días oímos en las noticias que un pirata informático ha atacado tal o cual empresa y nos parece de ciencia ficción.

    Esta semana lo he sufrido en mis carnes, o mejor dicho, en mis web por partida doble!!! Y es muy frustrante pues los datos se han podido recuperar, pero no los miles de coments que habéis ido dejando a lo largo de los años en este blog. Muy triste, porque desde luego, enriquecían este sitio tanto como mis publicaciones, así que poco a poco espero que vuestras opiniones vuelvan a inundar este sitio para que quien quiere que haya tenido la mala baba de atacarlo, vea que ha servido de poco porque seguís estando ahí.

    Feliz semana...

   Me llama la atención, que pese a la cantidad de personas afectadas por la salida a bolsa de Bankia, haya tan poco ruido en las calles, y desde luego que solo sean los despachos de abogados los que vamos poniendo un poco de luz en el camino.

    Por si es de vuestro interés, os dejo el enlace de una entrevista que me hicieron esta semana a proposito del tema en Telvisión de León. Empieza en el minuto 29 del programa.

https://m.youtube.com/watch?feature=youtu.be&v=m_jz1bFAvRg  

Feliz fin de semana!!!

     No es la primera vez que comento que soy de las personas que de vez en cuando consigue sorprenderse en su día a día, y la verdad es que llevo una temporada que ciertamente voy de sorpresa en sorpresa, y además, las ultimas francamente gratas.

  La semana pasada, me desayune con un articulo publicado en el Diario de León  firmado por  Iñaki Ortega, un profesor de Deusto que hablaba sobre la generacion de los Milleumms, creo que se escribe así. Una tribuna que hablaba del siglo XXI, de los nuevos empleos que ni siquiera se han inventado. Lo cierto es que me parecio un soplo fresco de ideas y sobre todo de futuro. Pero esto no fue lo mas me impresionó, a fin de cuentas, podria ser simple ciencia ficción, lo que realmente me hizo reflexionar, fue como describio a su politico del futuro, solo con tres cualidades que tienen miga, mucha miga: según dijo este hombre, el politico del siglo XXI, que el concibe debe tener estos tres atributos:

                        CAPAZ, EJEMPLAR Y CERCANO.

  Y me dije, ahí es nada. Pero, tras unos minutos de reflexión, me di cuenta de que estas caracteristicas no me eran del todo ajenas, es mas, son tres de las cualidades que precisamente me exijo a mi misma cada dia, las que pido a mi equipo, las que abanderan mi despacho. Entonces ¿como es posible que me hayan parecido tan inalcanzables para las personas que nos representan?  ¿como es posible que no se les exijan y su incumplimiento no sea motivo de expulsión directa del panorama publico? ¿Es más, como hemos permitido que todos y cada uno de nuestros politicos o aspirantes a politicos no sean capaces, ejemplares y cercanos?

   Y entonces, en la noche de ayer, viendo a mi querido Pablo Motos, me encuentro que invita a Albert Rivera a su programa. Sinceramente, no soy persona que le guste mucho la politica, pero desde luego aunque no tienda a significarme, tampoco me es indiferente, pues por pura responsabilidad ciudadana no puede serlo. Pero reconozco que no suelo aguantar  mas de dos minutos las apariciones televisivas de nuestra clase politica, en general, por pura verguenza ajena y aburrimiento.

  Sin embargo ayer, reconozco que me enganché a la entrevista. No se si porque por fin, escuché lo que tanto tiempo esperaba oir, o mejor dicho, no oir. Y me refiero a alguien que habló de si mismo, no dio grandes ideas, pero al menos no se dedico al juego de descalificar a los demás y "tu mas". Puede que fuera porque yo tambien huebiera elegido la tortilla con cebolla, con la luz encendida y las bragas frente al tanga... ¿Quien sabe?

  Creo que merece la pena profundizar un poco más sobre este hombre de Ciudadanos, pero tambien advierto, si es uno más, seré la primera en dedicarle mi critica más feroz.

  Querido Albert, sigue desnudandote!!! necesitamos más politicos como Dios les trajo al mundo. O lo de ayer ¿fue una utopía?

    Hace poco, una buena amiga, publicó en su facebook algo así como que este año no queria regalos caros, ni felicitaciones via mail ni wpp. Queria una postal de Navidad, de las de verdad. Queria cambiar un pequeño detalle hecho a mano, queria volver a vivir la Navidad.

   Estoy totalmente de acuerdo, y yo hoy quiero regalaros algo mas intimo y especial, quiero compartir con vosotros que estoy feliz por lo que creo que ha sido la  recompensa a mucho esfuerzo. Porque esta semana he comprendido en mis propias carnes que "Dios aprieta pero no ahoga"... Se que para muchos, que lo estais pasando tan mal, estas palabras no tendrán mucho sentido, pero de verdad que si.

            Ayer por la noche, cuando ya me iba a acostar y cogí mi móvil para poner la alarma, si yo también soy de las que utiliza el teléfono más para cualquier otra cosa que para llamar a nadie, me encontré con una intensa actividad en el chat de la familia, ya saben, ese que casi todos hemos sido incluidos a través de  nuestro  Whats App en alguna reunión familiar, cumpleaños o momentos varios de exaltación de los vínculos de sangre. Ese chat que en general se utiliza para felicitar los cumpleaños, colgar la última viñeta chorra que pulula por la red, o cualquier  otra cuestión intrascendente que se nos ocurra en caso de aburrimiento.

          También es verdad que en el caso de mi familia, al ser bastante exenta, de vez en cuando, aunque las menos, suele surgir algún rifi rafe por motivo político o futbolístico.